There's some things you should never do, and getting too close to one of these bimbos is something you should stay away from for as long as you can. She'll fuck everyone you know and maybe even take some toys with her, so watch Never Trust A Pornstar if you dare, but don't try to recreate anything you see, or you may be struggling to satisfy an insatiable pussy for the rest of your life!
Sarah Vickers y Hellizabeth Queen pueden hacer desaparecer consoladores con sus vaginas, y se ha convertido en una de sus formas más románticas de pasar una velada. Se suben a una balsa y flotan hasta los arbustos, donde pueden deslizar el de color rosa en sus bocas para lubricarlo, y luego mirarse la una a la otra mientras se lo tragan los coños de ambas.
A Sarah Vickers y a Pink Lollypop les van todas las nuevas tendencias que arrasan en el país, así que llevan el maquillaje y el contorno perfectamente puestos, las pelucas de última moda y, lo que es más importante, los juguetes sexuales más novedosos en sus coños estirándolos con las formas adecuadas para todos los hombres anónimos que los utilizarán detrás de los callejones más tarde esta noche.
Foxy Prissy y Sarah Vickers saben que no deberían confiar la una en la otra, pero se esfuerzan por hacerse amigas aquí en las montañas rocosas. Están sacando lo mejor de su relación, y la naturaleza siempre es un lugar estupendo para recargarse y relajarse, así que se llevan sus juguetes favoritos a las montañas y se ponen cachondas mientras el sol brilla sobre ellas.
Sarah Vickers y Papillon quieren superar sus diferencias, así que cogen juntos sus juguetes sexuales favoritos y se meten juntos en la cama. Primero se lamen mutuamente los pezones y los coños, excitándose y preparándose para la penetración. Hay consoladores de clase clara, así como vibradores rosas que provocan escalofríos, y Papillon incluso lame parte del jugo del extremo de sus juguetes después de sacárselos a Sarah.
Sarah Vickers siempre ha sido una amiga en la que es difícil confiar, pero Karesse se acuesta con ella de todos modos. Es difícil encontrar una persona de confianza en la industria del porno, así que espera lo mejor y reza mientras se deleitan con los mejores vibradores de su colección. Primero es uno rosa, luego uno azul y después uno de color carne que se ata a las caderas y empuja dentro de su amiga.